• Desproporción entre tronco y extremidades
  • Aumento de volumen en MMIl de manera simétrica
  • Presencia de teleangiectasias o arañas vasculares
  • Fragilidad capilar (facilidad en la aparición de hematomas)
  • Dolor y/o pesadez, sensación de quemazón.
  • Piel a tensión con presencia de nódulos a nivel subcutáneo.
  • Presencia del signo de «cuff» (llamado coloquialmente de la copa)
  • Herencia genética. Existencia de otros miembros de la familia con la misma afectación.
  • Presencia de enfermedades autoinmunes como s.hashimoto, dermatitis o psoriasis.
  • Disfunciones venosas y linfáticas asociadas
  • Empeoramiento del cuadro con exposición a situaciones inflamatorias o cambios hormonales
  • Disbiosis e Hiperpermeabilidad intestinal asociada

Hoy desde clínica Constanza hacemos un resumen sobre los signos, síntomas y patologías asociadas a la enfermedad.

De un tiempo a esta parte está surgiendo mucha información sobre esta patología y habitualmente provoca muchas dudas y confusión en las pacientes. Aparte de los síntomas descritos anteriormente, es muy importante seguir los siguientes consejos para no precipitarse ni autodiagnosticarse o dejarse llevar por las RRSS.

  • Cuando surge la sospecha, buscar a un especialista. NO TODO ES LIPEDEMA.
  • Buscar varias opiniones si nos quedan dudas sobre nuestra primera visita.
  • Investigación de manera autónoma. Todavía se sabe poco sobre la patología. Existen bases de datos como pubmed donde pueden leerse algunos artículos interesantes.
  • Pensar que el lipedema es una patología que se puede tratar, controlar y mejorar . No hay que precipitarse en nuestras decisiones en cuánto a tratamientos.
  • Cada paciente es única y diferente. Es una patología crónica, muy amplia y que afecta a muchos ámbitos de la salud por lo que el tratamiento debe ser PERSONALIZADO y DINÁMICO.